Carreras de velocidad:
Las carreras más cortas son las denominadas de velocidad. En pista
cubierta se corren sobre distancias de 50 y 60 metros. Al aire libre,
sobre 100, 200 y 400 metros. En este tipo de pruebas, el atleta se
agacha en la línea de salida y, tras ser dado el pistoletazo de inicio
por un juez de salida, se lanza a la pista y corre a la máxima velocidad
posible hacia la línea de meta, siendo fundamental una salida rápida.
Los corredores alcanzan la tracción inicial situando los pies contra
unos bloques especiales de metal o plástico, llamados tacos de salida o
estribos, diseñados especialmente para sujetar al corredor y que están
colocados justo detrás de la línea de salida.
Vallas:
Las pruebas de vallas son carreras de velocidad en las que los
competidores deben superar una serie de diez obstáculos de madera y
metal llamadas vallas. Las pruebas de vallas al
aire libre más populares, para hombres y mujeres, son los 110 m vallas
(que se corren con las denominadas vallas altas), los 400 m vallas (con
vallas intermedias) y los 200 m vallas (con vallas bajas).
Relevos:
Las carreras de relevos son pruebas para equipos de cuatro componentes,
en las que un corredor recorre una distancia determinada, luego pasa
al siguiente corredor un tubo rígido llamado testigo, y así
sucesivamente hasta que se completa la distancia de la carrera. El pase
del testigo se debe realizar dentro de una zona determinada de 18 m de
largo.
Obstáculos:
La principal carrera de obstáculos cubre una distancia de 3.000 m, jalonada de vallas, una ría y otros obstáculos.
Marcha:
Las pruebas de marcha se corren normalmente sobre distancias que
oscilan entre 1.500 m y 50 km (las principales son las de 5, 10, 20 y
50 km) y son especialmente populares en Europa y Estados Unidos. La
regla principal de este tipo de carreras es que el talón del pie
delantero debe permanecer en contacto con el suelo hasta que la puntera
del pie de atrás deje de hacer contacto con el mismo. La regla está
diseñada para evitar que los participantes
Salto de altura:
El objetivo en el salto de altura es sobrepasar, sin derribar, una
barra horizontal (listón) que se encuentra suspendida entre dos
soportes verticales separados unos 4 metros.
Pértiga:
En el salto con pértiga, el atleta intenta superar un listón situado a
gran altura con la ayuda de una pértiga flexible, normalmente de 4 a
5 m de longitud y que suele estar fabricada con fibra de vidrio desde
que este material sustituyera al bambú y al metal, empleados hasta la
década de 1960.
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